El escritor Hernán Rivera Letelier, nacido en Talca en el año 1950, se convirtió el jueves 8 de septiembre en el ganador del Premio Nacional de Literatura de Chile, como anunció Julieta Brodsky Hernández, Ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Su obra se afinca en lo popular, en la Pampa, el desierto, las salitreras, los trenes, los fantasmas. Eso fue lo que hizo pesar su nombre para el jurado que en su resolución estampó:
“Por su capacidad de interpretar, poner en valor el imaginario e identidad del norte de Chile y la del patrimonio del territorio y de su gente con un estilo único y proyectándose como un gran contador de historias.
Rivera Letelier, es sin duda uno de los autores chilenos contemporáneos más leídos. Con treinta años de trayectoria y con sus obras traducidas a más de veintiún idiomas, ha sido capaz de retratar y rescatar el mundo de las salitreras y el norte del país, obteniendo gran reconocimiento a nivel nacional y mundial.
El máximo galardón de la literatura chilena se creó en 1942 y es entregado cada dos años a escritores nacionales que han destacado por su excelencia, creatividad y aporte trascendente. Está dotado con un monto cercano a los 23 millones de pesos chilenos, diploma y una pensión vitalicia mensual equivalente a 20 unidades tributarias mensuales.